Educación técnica: el desafío de convertirse en elemento clave para el talento humano

Por Arsenio Fernández, gerente SNA EDUCA y presidente Fundación WorldSkills Chile.

Hace bastante tiempo que la Educación Media Técnico Profesional (EMTP) dejó de tener la cualidad de formación terminal, convirtiéndose en el paso intermedio que debe facilitar la inserción laboral o el ingreso a la Educación Superior de los egresados de esta diferenciación formativa.

Esta aseveración se ve corroborada a través de diversos estudios que indican que aproximadamente un 40% de los egresados EMTP, optan por proseguir estudios superiores, porcentaje que va en aumento.

No obstante lo anterior, aún hay temas importantes que resolver para que estas trayectorias ocurran de manera adecuada, como son:

  • Reorientar el Foco de la Formación EMTP: las instituciones formativas de este nivel deben privilegiar el desarrollo de conocimientos y capacidades de carácter tecnológico y competencias genéricas, las cuales son consideradas de base para que los estudiantes puedan integrarse con éxito, ya sea en el mundo laboral o Educación Superior, respondiendo con ello a las exigencias de la sociedad actual.
  • Calidad y Pertinencia en la EMTP y ETS: establecer programas de actualización de docentes técnicos en forma permanente, preferentemente en empresas de avanzada, sería un significativo aporte pata establecer mecanismos fluidos de conexión y beneficios recíprocos entre los ámbitos productivos y formativos, a través del cual se podrá proveer de herramientas actualizadas e innovadoras a los docentes, facilitando la entrega de una formación actualizada y de calidad a sus estudiantes.
  • Articulación de los Niveles Formativos: los programas de estudio de EMTP y Educación Superior muchas veces no tienen conexión, por lo que en este sentido resulta sustancial establecer un sistema de articulación formal entre ambos niveles formativos. Hoy, las iniciativas en este sentido son aisladas, dependiendo exclusivamente de la voluntad de las instituciones, resultando muchas veces ineficientes, debido a que se centran más en intereses institucionales que en los estudiantes, los cuales muchas veces se ven enfrentados a repetir contenidos ya cursados, no permitiendo que sus aprendizajes previos sean reconocidos.
  • Marco Nacional de Cualificaciones: este instrumento contribuirá generando las condiciones para desarrollar trayectorias formativo laborales, de acuerdo a las capacidades e intereses de las personas, además de facilitar la articulación entre los diferentes niveles formativos, la definición de estándares de desempeño y calidad en cada nivel, y generará con su implementación importantes aportes para el desarrollo del país.

La Educación Técnica de nuestro país, en todos sus niveles, tiene el desafío y responsabilidad de formar personas con las capacidades y estándares de calidad demandados por una sociedad cada vez más exigente y cambiante, constituyéndose en un elemento clave para la generación del talento humano y por ende para el desarrollo de Chile y sus diversas actividades económicas, aportando a la productividad y competitividad.

Ve la columna originalmente publicada en www.aequalis.cl