IP-ARCOS

FIESTA DE LA TIRANA: MÁS ALLÁ DE LA RELIGIOSIDAD

Todos los años el pueblo de La Tirana celebra la fiesta de La Virgen de La Tirana, fiesta en donde más de 250 mil turistas, fieles y feligreses llegan al pueblo para ser parte de esta gran celebración que dura una semana entera.

Fiesta de la Tirana

La Tirana es mucho más que una celebración religiosa, es un encuentro cultural con las raíces andinas. Se pueden ver las comparsas, escuchar su música con instrumentos musicales típicos del norte, además de contemplar las bellas danzas que reflejan las costumbres de indios, criollos, mestizos y negros que ocuparon estas tierras de antaño.

Este año se ha suspendido la fiesta debido a la pandemia que afecta a nuestro país y al mundo entero, pese a las esperanzas del Obispo de Iquique, Monseñor Guillermo Vera, que las circunstancias para julio pudieran ser diferentes.

La Fiesta de La Tirana, tuvo durante casi todo el siglo XX un desarrollo ininterrumpido. Hasta este año solamente en tres ocasiones no se había realizado: En 1934, 1991 y 2009. En esas oportunidades también por temas de salud; en 1934 por el tifus exantemático y la viruela; en 1991 por el cólera y en 2009 por la gripe A (H1N1).

Historia

La tradición de esta fiesta se origina en una leyenda que data de 1535, cuando Diego de Almagro salió del Cusco a conquistar Chile. Cuentan que en la comitiva iba Huillac Huma, último sacerdote del extinguido culto del sol, a quien acompañaba su hija, Ñusta Huillac que componían la expedición en calidad de prisioneros y rehenes para conservar la sumisión de los miles de yanaconas que lo acompañaban.

Cuando el ejército avanzaba cerca de Pica, huyó la joven seguida su padre y otros servidores, al bosque de Tamarugos, hoy llamado Pampa del Tamarugal. Durante cuatro años trataron de defender la causa de su Nación.

Ñusta fue temida por sus enemigos y conocida con el nombre de la bella «Tirana del Tamarugal» Un día llegó prisionero ante la joven un extranjero que dijo llamarse Vasco de Almeyda. El destino quiso que ambos se enamoraran y el español la convenció para que se bautizara. Ella accedió y en los momentos en que Almeyda bautizaba a la joven, sus seguidores se sintieron traicionados y dispararon sus flechas sobre ellos.

Años más tarde el evangelizador de Tarapacá encontró en el claro del bosque del Tamarugal una cruz cristiana, y en el mismo sitio levantó una iglesia que se ha conservado hasta nuestros días con el nombre de «Nuestra Señora del Carmen de la Tirana de Tarapacá».

La fiesta

Desde distintas regiones de Chile y desde países como Bolivia, Perú y Colombia arriban todos los años a La Tirana, para venerar a la Virgen del Carmen en su tradicional celebración. Los visitantes pueden acceder a conocer los diferentes atractivos turísticos del lugar gracias al punto informativo que dispone Sernatur/Tarapaca, para la multiplicidad de peregrinos que vienen de lugares como Tacna, Oruro, Iquique, Tucumán, Santiago, Ovalle, La Serena, Arica, y otras(os) que viajan desde Europa y los Estados Unidos.

El pueblo de La Tirana, a unos 20 kilómetros de Pica en medio de la Pampa del Tamarugal, se transforma entre el 12 y el 17 de julio en un mega-evento donde participan y confluye un público masivo de distintas nacionalidades.

Los «bailes chinos» llegan en camiones, buses, camionetas, autos y a algunos a pie, porque quieren pagar mandas. Otros se arrastran arrodillados desde la entrada del pueblo, con las rodillas sangrantes y ayudados por parientes o voluntarios de la Defensa Civil y la Cruz Roja chilena.

El concepto de la Economía Creativa se amalgama en la instalación de un sinnúmero de tiendas, negocios y locales programados e improvisados que se despliegan en las noches y calles del pueblo. La plaza frente a la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen de La Tirana, y la imagen venerada de la madre de Jesús, como elementos simbólicos que han sido debidamente adornados y producidos para estas festividades. El Obispo de Iquique viaja cada año a rezar una misa solemne en el lugar, como acto e hito que funde lo patrimonial y cultural, con la instalación de un nuevo contexto de turismo sustentable y sostenible que protege la expresión cultural autóctona de los habitantes de la Tirana, dando a conocer sus tradiciones étnicas y ancestrales.

Fuentes:

Marylin Peñaloza Vallejos
Ingeniera en Gestión Turística
Licenciada en Administración Turística
Docente Escuela de Territorio y Sustentabilidad
Carreras: Turismo Sustentable – Gestión y Producción de Eventos
Instituto Profesional ARCOS